¡Buenas mis queridos lectores!, ya sé que han pasado casi todo el mes de mayo, pero aquí estoy para hablaros de las lecturas de los dos últimos meses. La verdad es que en mi mente había leído menos de lo que realmente fue, así que estoy contenta.
En primer lugar leí la trilogía de
Sombra y hueso, de
Leigh Bardugo, y cuyos títulos son
Sombra y hueso,
Asedio y tormenta y
Ruina y ascenso. Esta ha sido mi primera toma de contacto con el universo Grisha, y la verdad es que me ha encantado, aunque para seros sinceros el segundo libro se me hizo un poco más cuesta arriba que los otros dos. En esta nueva aventura en la que me enfrasqué, nos encontramos con personajes muy interesantes, Alina, Mal y El Oscuro. Si no habéis leído esta novela de fantasía juvenil no sé a que estáis esperando. Y si lo habéis leído y os ha gustado el universo la autora tiene más libros ambientados en el mismo.
Continué leyendo
Purgatorio, de
Alberto Val, y la verdad es que aunque sabía de qué trataba el libro, por la sinopsis, no me imaginaba para nada como se iba a desarrollar, y sin duda me ha encantado de principio a fin. Es un libro que se lee en un suspiro pero que a la vez te hace disfrutar mucho. Y sin duda, para mi, ha sido una crítica muy bien planteada para los concursos de telerrealidad tipo Gran Hermano.
En quinto lugar nos encotramos con un manga, y es que sabéis que intento leer al menos un manga cada dos meses, aunque quizás lo ideal sería leer al menos uno al mes. En este caso se trata de un tercer tomo, y es el de
Nogami Neuro, del mangaka
Yūsei Matsui. Nuevos casos para investigar por nuestros protagonsitas, y tengo que deciros que uno en especial lo he disfrutado mucho y creo que podría tener consecuencias en el devenir en próximos números.
Y finalmente, en sexto lugar leí, realmente releí,
A sangre fría, de
Truman
Capote. Realmente siento que la primera vez que lo leí no era mi momento con este libro, y esta segunda vez lo he disfrutado bastante. Obviamente cuando comencé la lectura ya sabía lo que iba a suceder en la misma, ya no sólo porque fuera una relectura, sino porque se trata de una novela sobre un crimen real sucedido a finales de 1959 en un pequeño pueblo de Kansas. Sin duda se lo recomiendo mucho a la gente a la que le gusten los crímenes reales.
¿Cómo han ido vuestras lecturas de estos últimos meses? Espero que al menos hayan sido la mitad de buenas que las mías.
¡Nos leemos!
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