Hoy soy quien soy

¿Alguna vez os habíais parado a pensar que ocurriría con nosotros si no hubiésemos tenido a los profesores que nos tocaron?
Yo sinceramente cambiaría a la mayoría de los que me tocaron a mi, pero bueno. Bueno, cambiaría a la mayoría de los que me tocaron en el instituto, por que los que me tocaron en el colegio fueron fabulosos, es mas, si queréis lo grito.

De los que mas me acuerdo son de Jaime, de Arturo, de MariCarmen y de Dora a la que le enseñé como eran las vacas, es decir le enseñé lo vaga que era pintando solamente tres manchas negras a la vaca.

Todos ellos de una manera o de otra me enseñaron cosas de la vida. Jaime nos enseñó lo mal que se llevaban la a, la e y la o. Y por supuesto el estudio de temas por bloques, esto lo continuamos con Arturo, con el que aprendimos que copiar no era lo mejor del mundo, sobre todo después de que pillara alguna que otra chuleta. Y con MariCarmen, por lo menos yo, aprendí a tocar la caixa chinesa.

Estas son las personas que de una u otra manera me marcaron, me enseñaron a ser persona y me intentaron preparar para el mundo que me esperaba después del colegio. Con todo esto no quiero decir, ni por asomo que los profesores del instituto no intenten enseñarnos a ser personas, y por supuesto si que nos preparan para lo que nos espera después del instituto, nos abren los ojos y nos explican lo que ocurre en la vida real y no en nuestros mundos de Yupi. Son personas que nos quieren, o por lo menos eso quiero seguir pensando y por eso nos tratan como nos deberían de tratar todas las personas, como adultos.


GRACIAS, POR QUE GRACIAS A VOSOTROS HOY SOY QUIEN SOY.